El Benfica quitó la luz en el estadio y puso los aspersores mientras los jugadores del Oporto celebraban con su afición el título liguero portugués. Un detalle que importó poco a los recientes campeones, que siguieron con los festejos como si nada en la casa del eterno rival. El Oporto ganó el campeonato a falta de cinco jornadas para el final, al vencer al Benfica por 1-2, con tantos de Guarín y Hulk para los visitantes y un tanto de penalti anotado por Saviola para el Benfica. Curiosamente, para la celebración a la conclusión del encuentro, el Estadio Da Luz no hizo honor a su nombre y las luces se apagaron para no hacer más hiriente la celebración. El Oporto ha ganando todos sus partidos y todavia queda invicto en la Liga Portuguesa ya que nadie le ha sacado ningun punto del estadio Do Dragao.
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